La microcervecera segoviana 90 Varas elabora una cerveza negra picante dirigida a los meses de invierno. Esta Porter de influencia inglesa recibe el nombre de Alma Negra. Tiene la peculiaridad de que contiene cayena. De esta manera se desmarca de cualquier cerveza negra que hayamos probado. Los cerveceros de Cerezo de Abajo (Segovia) se aventuran con un concepto sugerente.
La primera vez que probé esta cerveza fue en el Barcelona Beer Festival 2018. En aquella ocasión, el personal del festival la servía de barril como es habitual. Mis impresiones por entonces fueron, “suave, ligera y agradable”. Cierto es que Esteve Puigpinós, director de operaciones de 90 Varas, me advirtió de que ellos perciben la cayena más en botella. Días después me enviaron una muestra.
La verdad es que han transcurrido cinco meses desde que deposité esta cerveza en un rincón del garaje con el epitafio de “mañana cae”. Sin embargo, no tengo la impresión que el tiempo haya causado estragos en ella tras catarla. Con el primer trago comprendí que los cerveceros tenían razón: sabe más a cayena en botella. No la recordaba tan picante. Ahora me parece bastante más impetuosa.
Alma Negra es una cerveza de aspecto negro opaco con escasa espuma color crema. El aroma nos recuerda a café y chocolate. Luego, el picante se desata intenso en boca, pero no resulta excesivo. Carece del sabor a pimiento que sí aparece en otras cervezas picantes. El trago termina con un ligero amargor más propio del café que del lúpulo. Los 5,5º de alcohol pasan desapercibidos.
En definitiva, nos encontramos ante una Porter muy especial. Gustará sobre todo a los amantes del picante. Sí, es una cerveza con personalidad, pero no alcanza los extremos de otras cerveza picantes; y lo agradezco. Creo que lo mejor es tomarla sola y dejar que se temple. Me gustaría probarla añejada en barrica.
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