La cerveza puede ser diferente según la forma de verla. Quiero pararme un momento a explicar esto: de forma general la vemos como una bebida alcohólica, aunque si nos gusta su sabor es algo que disfrutamos. Si vamos más allá podemos conocer mejor las tradiciones de un país según el tipo de cerveza que se prepara, llegando a ser para muchos un estilo de vida. A nivel práctico puede ser una forma de ganarse la vida, pero para una persona también puede ser una pasión. Este es el caso de Isabel Vieitez.
Sevillana de nacimiento pero gallega de corazón, Isabel empezó a elaborar lotes de cerveza de manera autodidacta antes de montar Galician Brew, su propia microcervecera. Antes de llegar aquí se formó asistiendo a foros y ferias, pero también jugó un papel importante la titulación académica. Consiguió acreditarse en Microcervecería por la Universidad de Alicante y el Instituto de la Cerveza Artesana de Barcelona, aunque terminó de completar su formación en el CIFP A Granxa de Ponteareas con el ciclo superior de vinos, cervezas y licores.
La bodega de Galician Brew está ubicada en una casa rural de Ponteareas (Pontevedra). Esta era originalmente propiedad de los abuelos de Isabel y fue restaurada con el propósito de convertirla en un lugar donde poder elaborar cerveza en un entorno natural, sostenible y que busca crear un producto cercano a sus orígenes más tradicionales. Todo este proceso y el éxito de la marca han dado pie a la creación de cuatro variedades: Curuxa, Sabela, Rock in Rio Tea y Miña Terra Galega, las cuales podéis encontrar en su tienda.
Por cortesía de Galician Brew he tenido la ocasión probar la Sabela, que junto a Curuxa fue la primera cerveza lanzada por la marca. Lo primero que llama la atención de esta cerveza es su etiquetado que nos muestra la imagen de una mujer con motivos flamencos, como se pueden denotar en el estampado de topos del vestido e incluso en la postura. Trata de reflejar en esencia quién es Isabel Vieitez, una andaluza que hace su cerveza en Galicia. Esto es mucho más explícito si lo ponemos al etiquetado de Curuxa, que significa "lechuza" en gallego.
Dejando a un lado la botella, es hora de hablar de lo que contiene esta. Sabela es una Red Ale con 5% de alcohol que deleita nada más ser abierta. Predomina un olor acaramelado que es acompañado de un color rojo coronado por una espuma de color crema y sin demasiada retención. Cuando entra en boca tiene un imponente sabor ácido que poco a poco deja que se abra paso un leve dulzor, el cual tiene reminiscencias de caramelo o tofe. Al bajar, el sabor que deja es el de un amargor tostado pero que, al no ser muy intenso, deja una buena sensación. Para su elaboración se utilizaron, entre otros ingredientes, maltas de caramelo y lúpulos cítricos. También podemos destacar que el lúpulo usado es de cosecha propia.
Los sabores no llegan a pisarse entre sí en ningún momento, haciendo un conjunto muy acertado y disfrutable. En general es una cerveza que deja una sensación muy agradable y que no se hace pesada en boca, por lo que es ligera de tomar. En la página de Galician Brew se recomienda que sea tomada con carnes rojas, asados y guisos, aunque también se incluyen postres que lleven chocolate o nata. Si queréis más información acerca de esta microcervecera, no dudéis en buscarles y llenar vuestro vaso si los encontráis.
Escribe Diego Retuerta
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